Os habéis dado cuenta de esas personas,
que después de hacer música con sus manos al atardecer,
pasadas las 8 en punto,
se mantienen asomadas en esos balcones, en esas ventanas;
mientras en su cara se esboza una ligera sonrisa,
ese anhelo de libertad,
esas ganas de volar con el viento en las últimas horas del sol.
que después de hacer música con sus manos al atardecer,
pasadas las 8 en punto,
se mantienen asomadas en esos balcones, en esas ventanas;
mientras en su cara se esboza una ligera sonrisa,
ese anhelo de libertad,
esas ganas de volar con el viento en las últimas horas del sol.
Yo soy una de esas personas;
y me he visto reflejada tantas veces en sus caras
que ya empiezo a dudar de quién son ellas y quién soy yo.
y me he visto reflejada tantas veces en sus caras
que ya empiezo a dudar de quién son ellas y quién soy yo.